La decisión también es un revés para los esfuerzos de Washington por usar su influencia en Centroamérica para ayudar a evitar que China aísle a Taiwán.
TAIPÉI, Taiwán — China ha persuadido a Honduras para que abandone sus lazos diplomáticos con Taiwán y los establezca con Pekín, un golpe a la posición internacional de Taipéi días antes de que la presidenta de Taiwán se embarque en una gira por Centroamérica, que también la llevará a Estados Unidos.
El cambio redujo aún más el pequeño número de países que mantienen lazos con Taiwán, la democracia insular que Pekín reclama como su territorio, y también ha sido un rechazo abrupto a los esfuerzos de Washington para apuntalar a los aliados de Taiwán en Centroamérica. Los líderes de China tratan de aislar a Taiwán mientras le exigen que acepte la unificación. Estados Unidos, por su parte, ha estado tratando de reforzar la seguridad y la posición de la isla.
El alejamiento de Honduras puede parecer un asunto menor en el enfrentamiento de décadas entre China y Taiwán, pero los aliados diplomáticos de la isla ahora son tan pocos que cualquier abandono es un serio revés.
La declaración del sábado de la Secretaría de Relaciones Exteriores y Cooperación Internacional de Honduras fue concisa y decía en parte: “Taiwán forma parte inalienable del territorio chino y a partir de la fecha, el gobierno de Honduras ha comunicado a Taiwán la ruptura de relaciones diplomáticas, comprometiéndose a no volver a tener ninguna relación o contacto de carácter oficial con Taiwán”.
Poco después de que Honduras publicó su declaración, Joseph Wu, ministro de Relaciones Exteriores de Taiwán, dijo en una conferencia de prensa, que “las acciones de China para reducir el espacio diplomático de nuestro país han herido gravemente los sentimientos del pueblo de Taiwán y acelerado la dirección contraria de las relaciones en el estrecho”. Una declaración en Twitter del Ministerio de Relaciones Exteriores expresó el “profundo pesar” de Taiwán por el fin de la relación diplomática con Honduras.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de China también intervino el domingo. “China aprecia mucho esto”, decía en parte su declaración, calificando la decisión de Honduras como “una elección correcta que se ajusta a la tendencia general y a la voluntad del pueblo”.
Aunque no se refirieron directamente al alejamiento de Taiwán, funcionarios del gobierno de Honduras dijeron esta semana que forjar vínculos más estrechos con China era vital para mejorar la debilitada economía del país.
“Lo que se busca a través de la relación con China es lograr la inversión para sobrellevar los retos que tiene el país”, declaró a la prensa Rodolfo Pastor de María y Campos, secretario de Estado hondureño, al señalar que el país arrastra una deuda de más de 20.000 millones de dólares.
China y sus inversores ya han mostrado un claro interés en el país, al financiar una presa hidroeléctrica y explorar proyectos ferroviarios y portuarios en Honduras.
La relación diplomática entre China y Honduras se produce días antes de la visita de Tsai Ing-wen, presidenta de Taiwán, a Belice y Guatemala, los dos aliados latinoamericanos que le quedan a Taiwán, para estrechar lazos. La presidenta Tsai partirá de Taiwán el miércoles en un viaje que también incluirá escalas en Estados Unidos, por lo que Pekín ha elevado una protesta.
En una publicación en Facebook, la presidenta Tsai dijo que los esfuerzos de China para suprimir la participación internacional de Taiwán no “disminuirá la voluntad del pueblo de Taiwán de adherirse a la libertad y la democracia, y de avanzar hacia el mundo”.
China exige que los países con los que mantiene relaciones diplomáticas dejen de reconocer a Taiwán. Desde que Tsai asumió el cargo en 2016, se ha ido reduciendo el número de aliados diplomáticos que reconocen a Taiwán como país independiente. Pekín cortó los contactos oficiales con el gobierno de Tsai porque se ha negado a afirmar que Taiwán y China forman parte del mismo país.
Solo 12 países y el Vaticano reconocen ahora a Taiwán, frente a los 21 que lo hacían a principios de 2017. La última vez que Taiwán perdió un aliado diplomático fue en 2021, cuando Nicaragua estableció relaciones diplomáticas con China.
“Ciertamente es un gran golpe”, dijo Lu Yeh-chung, profesor del departamento de diplomacia de la Universidad Nacional Chengchi en Taipéi. “Las relaciones diplomáticas formales con países pequeños siguen siendo muy significativas para el estatus internacional de Taiwán”.
La decisión de Honduras representa un revés en los esfuerzos de Washington por utilizar su influencia en Centroamérica para ayudar a impedir que China aísle a Taiwán en la escena mundial. El Departamento de Estado dijo que el presidente Joe Biden envió un delegado a Honduras a principios de este mes, un viaje que fue anunciado después de que Honduras indicara que cambiaría sus vínculos.
“Es fácil para Washington molestarse cuando países como Honduras cambian su alianza de Taiwán a Pekín”, dijo Mitch Hayes, experto en las relaciones de China con América Latina y director de Veracity Worldwide, una consultora de riesgo político en Nueva York. “Pero realmente tienen que entender que es una estrategia bastante racional para un país pequeño y para las economías emergentes. Podemos esperar ver más de esto en los próximos años”.
China y Taiwán llevan mucho tiempo practicando lo que algunos analistas han descrito como “diplomacia de chequera” para cortejar a los países proporcionándoles ayuda y préstamos. Joseph Wu, ministro de Relaciones Exteriores de Taiwán, declaró el jueves en una reunión del poder legislativo que Honduras había exigido un “alto precio” a Taiwán.
Antonio García, el vicecanciller de Honduras confirmó en una entrevista el viernes que desde septiembre pasado Honduras había solicitado 2000 millones de dólares en préstamos al menos en cuatro ocasiones separadas durante reuniones y cenas con funcionarios taiwaneses.
“El acercamiento fue: ‘Ayúdennos, tenemos que entregar resultados, va a ser un alivio. No les estamos pidiendo que nos den nada gratis; les vamos a pagar’”, dijo García, y agregó que el préstamo se habría utilizado para pagar parte de la deuda del país.
García dijo que sostuvo dos conversaciones con funcionarios taiwaneses sobre un préstamo y que en ambas ocasiones recibió una respuesta evasiva. “Escucharon atentamente y nos dijeron que iban a hacer las consultas respectivas con la Cancillería en Taipéi”, dijo.
Wu, ministro de Relaciones Exteriores de Taiwán, dijo en la conferencia de prensa del domingo que además del préstamo de 2000 millones de dólares, Honduras también le había pedido a Taiwán que gastara 45 millones en la construcción de un hospital y 300 millones en la construcción de una represa, pero luego elevó esas cifras a 90 millones y 350 millones.
En los días previos a la ruptura oficial entre Honduras y Taiwán, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Taiwán había expresado su “seria preocupación” a Honduras por la noticia de su decisión y había advertido al país sobre el riesgo de aceptar el dinero de China.
“Queremos recordar al gobierno de Honduras que, ya que ha estado plagado de problemas de deuda, no beba veneno para saciar su sed, o caerá en la trampa de la deuda de China”, dijo Jeff Liu, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Taiwán, en una rueda de prensa reciente.