Las frutas y verduras cierran el año con encarecimientos de doble dígito, pero también otros alimentos como el pan, las tortillas, la carne de res y cerdo, la comida, los aceites, el café, la comida para bebé y la comida preparada fuera de casa anotaron niveles de inflación superiores a la tasa general.

Una ola de inflación alcanzó a todo el mundo durante 2022, en México como en otros países, las familias más pobres han sido las que recibieron el golpe más fuerte.

Los alimentos fueron el rubro que registró los encarecimientos más pronunciados, y otros productos y servicios de primera necesidad también subieron de precio presionando los bolsillos de las familias.

En diciembre del 2022, México anotó una tasa interanual de inflación de 7.82%, apenas por debajo del 8% que había registrado en meses previos. El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) cerró el año con presiones en sectores de alta incidencia: los agropecuarios, los alimentos procesados, el transporte y la salud.

De acuerdo con cifras procesadas por El Economista del INPC del Inegi, las frutas y las verduras ocupan los primeros lugares en el ranking de alimentos que cierran el año con los encarecimientos más pronunciados.

El top diez de alimentos con las tasas de inflación interanual más altas fueron:

  • Chile serrano: +82.05%
  • Naranja: +40.20%
  • Papa y otros tubérculos: +35.54%
  • Pepino: +28.41%
  • Sandía: +27.14%
  • Pan blanco: +27.12%
  • Huevo: +25.67%
  • Ejotes: +24.49%
  • Calabacita: +23.31%
  • Lechuga y col: +21.58%

Otros agropecuarios y alimentos procesados que cierran el año con inflación de doble dígito fueron las tortillas, los quesos frescos, los aceites, las pastas para sopa, el café, los mariscos, algunos cortes de res, la carne de cerdo, la comida para bebés y la comida preparada fuera de casa.

De hecho, se observa que casi todos los alimentos que se contemplan en el INPC registraron tasas de inflación superiores al nivel general en diciembre del 2022.

Esto explica por qué las familias con menores ingresos son las que más sufren la inflación. En México estos hogares son los que tienen que destinar la parte más grande de su dinero sólo a la alimentación, que justamente es el rubro que más encareció durante y al cierre del 2022.

De acuerdo con cifras del INPC del Inegi (Instituto Nacional de Estadística y Geografía), las tasas de inflación fueron distintas de acuerdo con el estrato de gasto de los consumidores.

En diciembre, por ejemplo, la tasa de inflación general para el estrato que contempla hogares con ingresos de hasta un salario mínimo fue de 9.14%, y si sólo se considera la inflación en alimentos la tasa escala hasta 14.97 por ciento.

Por su parte, en el estrato que contempla hogares con ingresos superiores a seis salarios mínimos la tasa general fue de 7.36%, mientras que la inflación de alimentos anotó 12.10 por ciento.

La inflación es uno de los indicadores macroeconómicos y de política monetaria que impactan de manera más directa en la economía de los hogares. La inseguridad alimentaria, los niveles de desigualdad y el consumo privado ya han sido impactados por el alza acelerada de los precios.

Los expertos y las instituciones internacionales esperan que durante 2023 las tasas de inflación se relajen, pero para alcanzar las metas de los bancos centrales tendremos que esperar, por lo menos, hasta 2024.

Fuente: El economista 09/01/23