Según el IPCVA en diciembre pasado el precio promedio de la carne subió un 9,7% mensual y un 60,7% interanual, ubicándose en torno a los $850,33 el kilo. Los cortes parrilleros registraron fuertes incrementos
En medio de las restricciones a la exportación de carne vacuna que implementó el Gobierno durante gran parte del año pasado, y que se extenderán hasta el 31 de diciembre de 2023, el consumidor en el mercado interno no se benefició con la medida ya que el precio se mostró en constante aumento. Así lo reflejó el relajamiento realizado por el Instituto de Promoción de la Carne Vacuna (IPCVA).
El mismo señaló que en diciembre pasado el precio promedio de la carne subió un 9,7% mensual, ubicándose en torno a los $850,33 el kilo. Y en relación a los precios de diciembre de 2020, los precios promedio de la carne vacuna del duodécimo mes del corriente año registraron un aumento de 60,7%. En el mundo de las carnes alternativas, el kilo de pollo entero registró una suba interanual de 36,9% y con un precio promedio de $215,43, mientras que el pechito de cerdo aumentó su precio en 2021 un 45,4% y el promedio del mismo se ubicó en torno a los $ 593,57.
Los precios de la carne vacuna tuvieron alzas significativas, del (+12,4%), en diciembre de 2021, con respecto a noviembre, en los puntos de venta que atienden en barrios de nivel socioeconómico alto. En los puntos de venta que atienden al nivel socioeconómico medio, los precios mostraron subas de menor magnitud, que resultaron del (+8,3%); mientras que en aquellos que atienden al nivel socioeconómico bajo los precios se incrementaron de manera significativa, (+10,3%).
En relación a los precios de diciembre de 2020, los precios promedio de la carne vacuna del duodécimo mes del corriente año registraron un aumento de 60,7%
El trabajo de campo fue realizado durante la primera y la segunda quincena del mes de diciembre de 2021. La muestra bajo análisis está restringida a 80 carnicerías de Capital Federal y el Gran Buenos Aires, que fueron relevadas telefónicamente. El seguimiento de los precios en supermercados se hizo en 40 puntos de venta relevados de forma presencial.
El IPCVA aportó un reflejo de que por más cepo a la exportación o por más cortes a precios accesibles para las fiestas en los supermercados que dispusiera el secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, la carne se alejó todavía mucho más de las posibilidades de la mayoría de los argentinos, que sufren los efectos de la inflación y el menor poder adquisitivo de sus salarios. A todo esto, hay que sumar la presión impositiva en los precios finales de los alimentos, que en el caso de la carne llega al 30%.
Además, las restricciones oficiales causaron enormes complicaciones a los eslabones de la cadena de ganados y carnes, y también al país por las menores divisas que ingresaron por las exportaciones, y el alejamiento de la Argentina del mercado internacional de la carne vacuna, que ya es ocupado por países de la región, como es el caso de Uruguay y Paraguay, que en 2021 registraron un nivel histórico de sus exportaciones.
Cortes
Otro dato que no es menor y que Infobae lo reflejó tiempo atrás, es lo relacionado al comportamiento de los precios internos de los siete cortes parrilleros (asado, tapa de asado, vacío, matambre, nalga, paleta y falda), cuyas exportaciones estuvieron restringidas hasta el 31 de diciembre del año pasado, y por decisión del Gobierno nacional se extienden hasta finales del 2023. Una medida oficial que no significó al consumidor una baja de los precios.
Al respecto, el informe del IPCVA mostró que el asado a lo largo del 2021 subió un 55,2% y en diciembre el kilo se comercializó a $870,68, un 10,7% de suma mensual. Además, la tapa de asado subió en 2021 un 55,4%, la falda un 54,9%, la cuadrada (que hasta ahora estaba prohibida y fue reemplazada por la nalga) aumentó un 59,7%, la nalga un 61,6%, el vacío un 59,1%, y finalmente el precio del matambre creció un 57,0%. Esto quiere decir que en general todos los cortes vacunos subieron más o menos lo mismo, más allá de que estuviera prohibida o no su exportación.
Por último, en el relevamiento privado también quedó determinado que, durante el año pasado, el lomo fue el corte que más aumentó: en diciembre pasado acumuló una suba interanual de 76,1% y su precio fue de $ 1.253,17 pesos el kilo. Por su parte, el corte que menos aumentó fue la carnaza común, que terminó el año costando la mitad que el lomo, es decir unos $638,37 el kilo, y con un incremento del precio promedio de 53,9%.